La falta de conocimiento es lo que hace que el pueblo de Dios perezca. Nunca es la falta de recursos o la falta de soluciones. Los recursos abundan, las soluciones también abundan. Es nuestra ignorancia de estas soluciones lo que nos hace estar esclavizados. 

No estaríamos esclavizados si todos hicieran su trabajo y eso es hablar sobre el evangelio de Jesucristo. Pastores preparen sus congregaciones para la gran cosecha por venir. Juan 8:32 dijo con razón: conocerás la verdad y la verdad te hará libre. 

Mi nombre es Cesar y soy una voz en el desierto 

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