Necesitamos un avivamiento espiritual para barrer la tierra; de lo contrario, hemos terminado, condenados como nación. Necesitamos reemplazar a los progresistas de "élite" que impulsan una ideología marxista cultural con hombres y mujeres que aman a Dios y le temen.

Estos reemplazos son personas humildes, dedicadas a la oración, que buscan el rostro de Dios y se apartan de sus malos caminos. Son los modernos Esthers, Elijahs, Ezekiels y Daniels. Sí, se acerca el final. El juicio está a la vuelta de la esquina, y luego Jesucristo establecerá el Reino de Dios en la tierra. Él dijo: "Inmediatamente después de la tribulación de aquellos días ... verán al Hijo del hombre viniendo en las nubes del cielo con poder y gran gloria" (Mateo 24: 29-30, KJV).

Él "limpiará todas las lágrimas de sus ojos; y no habrá más muerte, ni tristeza, ni llanto, ni habrá más dolor, porque las cosas pasadas ya pasaron ”(Apocalipsis 21: 4, KJV). Si bien sabemos con una precisión del 100 por ciento que las profecías del futuro son ciertas, no podemos ser complacientes. Jesús nos dijo que nos ocuparamos de los asuntos de nuestro Padre hasta que Él regrese. Por lo tanto, debemos luchar contra las malas obras de los progresistas. Al hacerlo, ¿quién sabe cuántos verán su error y se volverán a Cristo? ¡Amén!

Mi nombre es Cesar y soy una voz en el desierto

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